¿Cómo se creaba un aviso antes de Phostoshop?
En el transcurso de las clases de diseño gráfico y publicitario que dicto, hay un tema constante del que hablo con mis alumnos: ¿Cómo se hacía un aviso publicitario antes de la existencia de las herramientas digitales como Adobe Photoshop o Adobe Illustrator? Para muchos de mis alumnos es imposible entender cómo esto era posible.
Yo no tuve la oportunidad de trabajar de esta forma cuando egresé de mi carrera, sin embargo, tuve el privilegio de rodearme de personas que sí tuvieron esta experiencia (mis profesores), que de una forma u otra me hicieron vivirla a través de mis primeros años de estudio. En mi temprana etapa formativa, trabajé tal y como ellos lo hacían, usando mucho mis manos al realizar un arte. Para lograr mis primeros artes, apliqué la ilustración con temperas, acuarelas, lápices, estilógrafos rotring (http://www.rotring.com/es/), también el montaje de textos con letrasets (tema del que hemos hablado anteriormente en el blog y que pueden consultar dando click aquí), el calado de imágenes con una cuchilla o ayudado por la tijera, pegado con goma, etc
El trabajo era bastante arduo y debía ser muy detallista. Si alguna de las etapas del trabajo no era realizada con minuciosidad (por ejemplo si parte de la pieza que se hacía se manchaba con tinta donde no correspondía) había que ser un astuto con la forma de arreglarlo o tirarlo todo a la basura y empezar de nuevo.
En mi caso, por más que luego terminara usando un software, ha sido de gran ayuda, ya que al pasar a usar Photoshop o Illustrator he logrado utilizar las mágicas herramientas digitales con tanta responsabilidad como cuando usaba las físicas. Incluso me ha dado mayores conocimientos para realizar trucos que antes aplicaba al papel físico en el digital.
Hoy he quedado gratamente sorprendido al encontrar en YouTube un tutorial elaborado por www.lynda.com, coincidiendo con los 25 años de Adobe Photoshop, que narra el proceso de elaboración de un aviso publicitario "a la antigua", usando todas aquellas herramientas que han sido olvidadas por el trabajo en software. Espero que lo disfruten y ¿Por qué no? lo intenten en algún momento, ya que será una experiencia enriquecedora para su trabajo diario o para comprender a los diseñadores de hace varios años atrás.
¿Te atreves probar esta experiencia?
Columnista:
Daniel Collazos Bermúdez
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