Hace poco recibí un nuevo reto, una animacion de 10 segundos para un comercial de tv. Una animación en 3D, es generalmente un reto y eso en realidad, es lo que nos encanta a los que trabajamos en esto. El poder inventar o recrear mundos reales o imaginarios es una fascinación para muchos que , como yo desarrollaron esta pasión por el arte tridimensional. En este sentido, pocas cosas tan estimulantes (para un animador profesional) como asumir encargos que representen largas horas de planificación y experimentación, durante las cuales uno básicamente redescubre las herramientas de trabajo (software y demás) una y otra vez.
Esta vez me llama un cliente : “ te estoy mandando un video por mail, puedes hacer esto? En cuanto tiempo? Cuanto sería tu presupuesto?” y como siempre, “ lo antes posible porfa,”. Bueno, mis respuestas en el mismo orden: “por supuesto”,”dos semanas” y el envio del presupuesto. Debo acotar aquí que el pedido era copiar casi a exactitud el video remitido.
Ahora, digamos que las tres primeras veces que vi el video no entendí absolutamente nada. Sin embargo uno desarrolla un cierto instinto (el ojo del animador) que le permite determinar dichas cosas. Para resumir diré que terminé el trabajo en el tiempo acordado y con grandes felicitaciones y agradecimientos. El proceso , sin embargo, fue medio esquizofrénico (sobre todo la recta final).
Claro, se trata del interior de un motor, y hubiera sido bueno que me dijeran por lo menos eso antes de empezar. Ideal , que me hayan facilitado fotos y hasta planos del objeto en cuestión; y ya de niveles hollywoodescos, haber podido conversar con algún entendido en la materia que me explique el funcionamiento del mecanismo- o tal vez verlo en persona.
Sin embargo, todo es posible en este mundo , el real y el fantástico. Reconstruí las piezas en la computadora, una a una; hice un modelo de papel de las mismas para descifrar el funcionamiento y bueno; un par de amanecidas y listo.
Se trata de un cliente con el que trabajo bastante y hay una relación de profesionalismo constante, de lo contrario hubiera sido un poco mas inquisitivo con el pedido ala vez que realizado un análisis mas cesudo para hacer el diagnóstico de la ecuación tiempo de trabajo-presupuesto-necesidades . De todas maneras me quedan dos ideas importantes de este capítulo en el eterno aprendizaje del oficio : en el mundo del animador todo es posible sin emabargo, casi nunca nada es lo que parece.
Martín Jiménez
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